Un sistema de control de acceso es un sistema que restringe o permite el acceso de un usuario a un área específica validando la identificación y a su vez controlando el recurso (puerta, torniquete o talanquera) por medio de un dispositivo eléctrico como un electroimán, cantonera, pestillo o motor.
Por otro lado, los controles de acceso también permiten diferenciar entre niveles de permisos con lo cual, cada usuario, sólo podrá hacer uso de su llave para las instalaciones en las que tenga permiso.
Con el control de acceso se puede supervisar quién ingresa al recinto, sin importar que sean oficinas, almacenes, garajes, comunidades de propietarios, Hoteles, etc. Te damos la seguridad de llevar un control de ingreso y salida, de personas o vehículos.
Un sistema de control de acceso tiene tres funciones principales: la autenticación que permite la identificación de las personas o vehículos que solicitan acceder a una empresa o a una zona concreta; la autorización que gracias al software del sistema realiza las comprobaciones y envía la orden de abrir o no un acceso; y la trazabilidad que facilita la obtención de listados de las personas presentes en una zona o recinto.
Los sistemas de control de acceso tienen una característica que los hace atractivos: La flexibilidad. Las llaves pueden reajustarse para que permisos de acceso anteriormente denegados para un usuario puedan habilitar la entrada, o viceversa, en función de las necesidades de la instalación. En caso de pérdida de llaves, estas pueden anularse haciendo la instalación segura de nuevo con un sencillo ajuste, o directamente sin él, a través de actualizadores y con desplazamiento a la instalación o sin él, dependiendo de si el sistema elegido es Online u Offline.
En base a esto podemos encontrar diferentes tipos de control de acceso según el sistema de identificación que utilicen:
Sistemas de cerraduras digitales: con código secreto necesario para su apertura, el cual puede instalarse tanto e interiores como en exteriores y permite tener un control total de las personas que acceden al espacio donde se ha establecido.
Este sistema de cerraduras digitales con apertura de código es un modo bastante económico de aumentar la seguridad, siempre permitiendo a quienes se encuentre en el interior del edificio, donde se ha colocado, poder abandonar el lugar con rapidez en caso de incendio o necesidad urgente.
El código puede cambiarse cuando se desee, algo que se recomienda, ya que con el tiempo son bastantes quienes pueden llegar a conocerlo. Por otro lado, ya no debe preocuparse por tener las llaves antes de salir de casa o de su negocio, ya que para regresar solo será necesario marcar el código de acceso preestablecido para este fin.
Tampoco tendrás la necesidad de llamar a un cerrajero por haberte olvidado las llaves en el interior de tu casa, algo que en ocasiones puede ocurrir, con el alto precio que este olvido supone. Ahora bien, será de suma importancia que no olvides el número del código, ya que si lo haces no podrá acceder a tu vivienda o lugar de trabajo.
Debes tener sobre todo un especial cuidado con los niños y las personas de edad avanzada, ya que ante la dificultad que presentan para retener mentalmente el código, pueden encontrarse en ocasiones fuera de la vivienda sin posibilidad alguna de acceder a ella.
Sistema de proximidad: permite la utilización de tarjetas u otros objetos que al acercarlos al terminal inicia la autenticación.
Sistemas biométricos: que se basan en el reconocimiento de una característica física de la persona que solicita el acceso para que pueda ser verificada de forma automática e instantánea. El más utilizado en las empresas es el lector de huella digital, que cuenta con numerosas ventajas como evitar la suplantación de identidad, acabar con los problemas de olvido de tarjetas, además de ser un sistema sencillo y eficaz.
Sistemas de reconocimiento de matrícula o TAG: Controlan el acceso mediante la identificación de la persona, del vehículo o la combinación de ambas. Los vehículos pueden identificarse por tarjeta/TAG o por lectura de matrícula.
También podemos distinguir los tipos de control de acceso según la conexión que necesiten para cumplir con sus funciones. Pueden ser:
Sistemas de acceso autónomos: en los que no se requiere ningún tipo de conectividad ya que los propios terminales disponen de memoria para la gestión de los usuarios. Se trata de un sistema de una seguridad baja y de una capacidad muy limitada.
Sistemas de acceso en red: son los que utilizan herramientas como los softwares de control de acceso y que ofrecen un alto nivel de seguridad. Se pueden controlar a la vez infinitas zonas diferentes de la empresa, acotar los accesos por horarios y permisos, y además cuentan con la ventaja de que pueden englobar otras soluciones importantes para toda empresa como el control horario, de visitas, o incluso planes de evacuación y emergencias.
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